10 kilómetros de Laredo 2014. La crónica.

Camino del ecuador de carrera

Últimamente no encuentro tiempo ni ganas para actualizar el blog, así que aprovechando estos días de Semana Santa me autoimpuesto como penitencia publicar una entrada diaria de aqui al domingo. A ver si soy capaz.

Rozando el larguero.
Para los vagos, ése sería el resumen de mi participación en los 10 kilómetros de Laredo de este año.
Con muchas dudas, principalmente debidas a mi mala actuación en Pinto y a unas molestias en la zona de la ingle en el último rodaje el miércoles antes de la competición, me presentaba en mi carrera favorita de ruta para darlo todo un año más.

Viajé en coche con Karmele el viernes por la tarde después de trabajar. Lluvia, frío y viento nos recibirían en Liendo, el pueblecito cercano a Laredo donde nos alojábamos.
La mañana del sábado la cosa no pinta mucho mejor, más agua y sobre todo mucho viento. Mi miedo a las molestias en la ingle hace que me salte el rodajito matutino de activación que sí que hice en Laredo 2012 con tan buen resultado. Así que paseíto por Laredo con el paraguas, recogida de dorsal y comida en el italiano de turno, con un gran ambientazo de corredores venidos de todos los puntos de la geografía patria.
Un poco de relax en el hotel, me visto de romano y a la odisea de intentar aparcar en las inmediaciones de la salida.

Los trastos de matar

Este año tuvimos suerte y encontramos hueco rápido. Calentamiento. El dolor de la ingle no pita, pero aún así me lo tomo con mucha calma y hago los progresivos con mucho cuidado.

A la hora de la salida el tiempo ha mejorado bastante, no llueve y no sopla tantísimo el viento. Me coloco en el cajón que me ha asignado la organización, en esta ocasión el segundo detrás de la élite y esperar el pistoletazo. Confusión de nuevo en la salida, los organizadores intentan hacernos retroceder a la masa porque hay corredores que están por delante de la línea de salida. Tras el lío, pum, a correr.

Todavía con buena cara en el kilómetro 4

La salida de esta carrera cada vez es más caótica y peligrosa. Calle estrecha, muchos corredores nerviosos por coger su grupo y perder el menor tiempo posible. Sin duda, es el único borrón de esta magnífica competición, que por otra parte creo tiene difícil solución.

Desde el principio salgo a por todas y van cayendo los kilómetros entorno a 3:30, las sensaciones son de ir forzado (vamos, como iba realmente) pero sin cometer el error de salir excesivamente rápido. Paso el 5000 en 17:43 y llega la clave de mi carrera. Me quedo descolgado 10-15 metros de mi grupo y el viento que sopla mucho en contra, me hace perder unos segundillos por kilómetro que harán que se escape la marca personal entre los dedos.

Trato de aguantar como puedo el ritmo una vez que hago el giro de vuelta hacia meta y cambiar en el último kilómetro. Resultado: 35:41, mi segundo mejor 10000 en ruta de siempre a 8 segundos de la marca de Laredo 2012 (incluso algunos segundos menos si consideramos los tiempos netos).

5 minutos después de terminar, el viento

En otras carreras me hubiera pegado un bajón por estar tan cerca de la marca, pero en esta ocasión acabé realmente contento. Esos segundos arriba o abajo no significan nada. Valoro muchísimo el haber podido volver a correr en mis marcas después de la temporada pasada en la que estuve prácticamente parado todo el año. Vengo de no ser capaz de bajar de 38 en Canillejas, ni de 37 en Aranjuez en 2013. Después de muchísimo entrenamiento, muchísimas sesiones en solitario, me he dado el gustazo de poder decir: "estoy otra vez a mi nivel", cuando hace 6 meses me costaba rodar a 5 min/km.

Lo fácil que es perder la forma y lo que cuesta recuperarla.

Parciales de Garmin: 3:31 3:29 3:29 3:33 3:33 3:36 3:36 3:36 3:36 3:27 y un pico de 14 segundos.
Increíble el nivel de esta carrera, 93 tíos sub 33, 181 sub 35, 561 sub 40...

Clasificaciones
Vídeos
Fotos (de donde he sacado las imágenes de esta entrada)
Pedro Aboitiz
www.cantabru.com
www.revistarunonline.com
Macias Photography
Angel Tomás
www.vifoto.es

Espectacular el paisaje cántabro