jueves, 31 de julio de 2014

Fin de temporada: 400m y 800m Majadahonda y Carrera Fiestas de San Blas-Simancas

A darlo todo en una vuelta
Mi temporada atlética que comenzó (a nivel competitivo) en Noviembre en Canillejas ha llegado a su fin.
El balance ha sido muy positivo, pero de eso ya habrá tiempo en la clásica entrada resumen como hice en 2010/2011 y 2011/2012.

En julio, terminé mi temporada pistera con una pequeña alegría. Por segunda vez en mi vida, salí de tacos para disputar un 400. Mi anterior experiencia en la distancia databa la temporada 2006/2007, mi año de debut en el Páris, en una liga de clubes. En esta ocasión, la cita fue en Majadahonda con el objetivo de bajar del minuto. Las sensaciones en este tipo de carreras son totalmente diferentes, se sale a tope, el láctico se empieza a acumular y la última recta es de auténtico sufrimiento, de querer avanzar y no poder. Está claro que no entreno para distancias tan cortas, pero me fui a casa tan contento con mi 59.22, única marca personal que he batido esta temporada.

¿Cómo se pone uno aquí?
 Después del 400, hice el último asalto al 800, otra vez en Majadahonda. Por primera vez en todo el año, los jueces nos colocaron por calles como los buenos. Es decir, que cada uno corre por su "carril" hasta el 100, donde ya es calle libre y te puedes meter a la 1 cuando quieras o te dejen el resto de los competidores.
Mi idea era arriesgar al máximo para intentar bajar de 2:09 pero no tuve buenas sensaciones en ningún momento de la carrera. Me tocó en un serie un poco perra, mucho tirón, contacto y ritmo nada constante. En la recta final me vi sin "punch". Por primera vez esta temporada salí sin reloj, así que no supe el resultado hasta que los jueces sacaron las clasificaciones. Creía que me había ido a 2:11-2:12 pero la verdad es que es tuve otra vez a menos de un segundo de mi marca personal: 2.09.42. Una lástima, es mi tercer mejor 8 de siempre pero me quedo con la rabia de haber tenido la marca en las piernas y no haber sido capaz de plasmarlo en una competición. El año que viene habrá que volver a la carga.

A punto de pasar por el 400 en Majadahonda
Entre el 400 y el 800 disputé también la carrera popular de las Fiestas de San Blas-Simancas. Este tipo de pruebas, organizadas con mucha ilusión (en este caso por el club Suanzes de San Blas) y con pocos medios, son cada vez menos usuales en el calendario madrileño, y sin embargo, son mis favoritas. Ambiente popular y de barrio, inscripciones gratuitas un ratito antes de salir, circuito bien marcado...vamos atletismo 100%,
Esta carrera la corrí hace muchos años con Vicente y he podido comprobar que sigue siendo una prueba que merece la pena. ¿El recorrido? 4 vueltas al circuito del cross de veteranos en el parque de Arcentales.
La participación fue baja pero los que estuvimos lo pasamos genial. La competición no tuvo mucha historia, desde el principio un chaval joven se escapó y nos quedamos atrás un grupito de 3 persiguiéndole. Durante la tercera vuelta me puse a tirar del carro y logré cazar al escapado. Nada más coronar la cuesta dura, el chico cambió de nuevo y traté de pegarme, cosa que conseguí hasta llegar a la curva contraperaltada. Ahí ya se me fue y no pude echarle mano. Resultado: 2º en la general y primer veterano, así que me llevé una copita a casa.
Entrega de premios
 Por último, mi intención era cerrar la temporada con un milqui en Leganés. De hecho aboné la inscripción y todo, pero el día de la carrera me levanté con muchísimos dolores musculares y el pulso altísimo. Así que, decidí quedarme en casita bajo el aire acondicionado. Y colorín, colorado, esta temporada se ha acabado.

Fotografías gentileza de Jegarru, Karmele y Antonio Peláez

jueves, 10 de julio de 2014

Tres carreras en 7 días: Reunión de Leganés (800m), Campeonato de Madrid Absoluto (5000m) y Memorial Adrián Martínez (800m)

A cola de grupo desde el inicio en Leganés
Con un poco de retraso, os sigo contando mi periplo por las pistas de la Comunidad de Madrid. Los últimos días de junio fueron especialmente intensos. En siete días me metí tres competiciones entre pecho y espalda.

La primera de ellas fue la Reunión de Leganés. Dado que en Aranjuez me quedé con sensaciones de tener algo más en las piernas, me decanté de nuevo por el 800. El día de la competición fue fiesta en Madrid, así que pude dormir un poco más y llegar descansado a la carrera. Viaje hacia el sur y calentamiento con mi compi del Páris Jaime que debutaba en el 800 este año y le pegó un bocado espectacular a su marca personal.
Mi serie fue muy fácil de correr tácticamente. El nivel de mis rivales era muy alto (se ganó por debajo de los 2 minutos), así que me limité a ponerme a cola de grupo y a sufrir a muerte. Jaime me canta el 400 en 1:03-1:04. Aprieto dientes el úlitmo 200 y sorpresa, consigo bajar de 2.10: 2.09.89. El día fue caluroso pero no perfecto porque soplaba bastante viento.
Sufriendo al paso del 400 en Leganés
Llegada a meta en Leganés: sub 2'10
La segunda cita fue el Campeonato de Madrid Absoluto en Alcorcón, dos días después. Tenía dudas sobre qué correr. Como las inscripciones a las carreras de pista hay que hacerlas con unos día de antelación, me apunté al 800 y al 5000. Leganés me sirvió para coger moral, así que decidí probar suerte en el 5000 de nuevo con el objetivo de hacer 17:30.
En esta ocasión la representación parisina fue un poco más numerosa, Jaime y Diego se animaron también con el 5. Con buen criterio solicitamos en secretaría que nos incluyeran en la segunda serie, la más lenta. Eso nos ayudó a correr con gente de nuestro nivel y sobre todo, a no molestar a los corredores más rápidos que disputarían el campeonato.
Salí un poco más agresivo, pasando el primer mil en 3:27 y el segundo en 3:31, pero el 5000 en pista es una prueba que se me hace muy dura mentalmente y los dos siguientes parciales se me fueron a 3:36. El cambio final no sirvió para mucho. La marca prácticamente la misma que la que realicé en el campeonato de veteranos: 17:44. El 17:30 tendrá que esperar a la próxima temporada.
El viento tampoco ayudó en el 5000 de Alcorcón
La última prueba de esta "trilogía" fue el Memorial Adrián Martínez en Arganda del Rey. Esta reunión es, sin duda, una de mis favoritas del calendario madrileño. El nivel siempre es muy alto para ser una prueba provincial, por lo que es una excelente oportunidad para los populares como yo para ver atletismo del bueno a pie de pista. Este año hubo un ambientazo excepcional con hasta 7 series de 800 metros, que de nuevo fue la prueba que corrí. Como punto positivo resaltar el cronómetro presente en meta, lo que permite controlar el ritmo al paso por meta sin tener que mirar el reloj.
En Arganda no hubo excusas para correr rápido, el día era soleado pero sin mucho calor y no había nada de viento. Mi idea era intentar el asalto a mi MMP de siempre, 2.08.66. Así que salí con todo. Paso del 400 en 1:02-1:03 tras pasar un atleta en recta de meta y agonía en la recta final. Por momentos creí que entraba en 2.07, pero clavé un poco al final. Los resultados oficiales me dieron un crono de 2.09.02. A menos de medio segundo de mi marca. Una lástima. El consuelo que me llevé fue la sensación de haberlo dado todo y por supuesto, mi segunda mejor marca de siempre con 35 palos.